Quique Sánchez Flores afronta su último partido al frente del Atlético de Madrid con la tranquilidad de haber conseguido dejar al equipo en Europa League. El reto para el partido ante el Mallorca es intentar ganar y quedar sexto o quinto para así evitar jugar en verano la previa de la competición europea, lo que sería una 'hipoteca' para el futuro entrenador rojiblanco: "Yo estoy harto de recoger hipotecas de todo tipo, así que considero que la hipoteca de la previa de la Europa League es menor. Aún así queremos quedar lo más arriba posible, pero sobre todo porque es bueno para nosotros".
Sobre Forlán, que podría quedarse fuera de nuevo de la lista de convocado, el técnico madrileño intentó evitar más confrontación: "En este caso he tenido que utilizar una energía diferente a la habitual, pero desde hace tiempo. Dije que elegiría la lista de citados de la manera lo más justa posible, pensando en el rival de mañana. Sé que Dominguez se cae de la lista por unos problemas de vértigo, que le durarán unos días. Será una nueva oportunidad para Pulido, que estoy encantado con gente como él: joven y de la cantera".
Una hipotética victoria del Atlético ante el Mallorca podría dar la salvación a alguno de los equipos que se juegan este fin de semana su futuro próximo. A Quique le tira su ex equipo, el Getafe: "Al final en este mundo tocas a tanta gente de Primera y conoces a tanta gente que ojala que no bajara nadie. Si ganamos y alguien se beneficia espero que sea el Getafe, pero mañana jugamos para el Atlético de Madrid".
En el capítulo de nombres propios, Quique ha hablado de Mario Suárez, al que ve como un jugador de futuro incluso para la Selección: "Sus problemas de pubis le han restado posibilidades en su rendimiento este año. Es un gran jugador de futuro, de los que pueden estar en la Selección dentro de unos años", dijo.
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