Arsene Wenger intentará un año más retener a toda costa a Cesc Fábregas en el Arsenal. Según informa hoy el 'Daily Star' el entrenador francés pedirá a cualquiera que quiera contratar a la estrella de su equipo nada menos que 68 millones de euros (60 millones de libras).
Parece que de nada servirá el acuerdo al que había llegado con el jugador, al que había prometido dejarle marchar la próxima temporada después de que Cesc expresara publicamente su deseo de fichar por el Barça, y que el club catalán no cumpliera las expectativas económicas de los ingleses.
Si Wenger se mantuviera en sus trece, como ha hecho hasta el momento en lo que se refiere al capitán de los 'gunners', se antoja complicado que el Barça esté en condiciones de hacerse con el gran sueño de Pep, toda vez que en el club se ha instaurado uina política de austeridad desde la llegada de Rosell y la irrupción de Thiago podría hacer innecesaria la incorporación de Cesc.
En las últimas fechas desde Italia se ha venido asegurando que Cesc se encuentra también entre la lista de objetivos principales del Milán. El equipo de Allegri piensa ahora en volver a reinar en Europa después de recuperar el trono en su país, y uno de los puestos a reforzar es el de un creador de juego, ya que este verano abandona el equipo Andrea Pirlo.
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